Al hablar de grandes boxeadores puntanos, nos viene a la memoria el recuerdo de unos de los grandes de la provincia. El recuerdo del mercedino José María Gatica mejor conocido como el Mono.
Buenos Aires 7 de diciembre de 1945, El Mono tiene su primera pelea profesional, para nada nervioso el tiene sus puños lustrados. La vida lo hizo a golpes y lo obligo a enfrentar el miedo. Mientras se acerca al ring y cruza las cuerdas recuerda. Recuerda siendo un niño de 7 años lustrando botas en Plaza Constitución, recuerda sus peleas callejeras para mantener su puesto en la estación de trenes, recuerda el hambre, el frío y la pobreza que siempre lo acoso. Sus ojos se encienden, entra en el cuadrilátero suena la campana y… El no tiene miedo.
El Mono gano su primera pelea profesional noqueando en el primer asalto a Leopoldo Mayorano. Ese mismo mes ganaría dos peleas más, comenzando una carrera boxística imparable donde se cruzaría con grandes oponentes, uno de ellos seria su archirival Alfredo Prada, con el que tuvo seis combates con resultados igualmente divididos y quitándose el titulo mutuamente.
Un boxeador carismático que supo ganarse el cariño de la gente y hasta del presidente de turno en ese entonces, el general Juan Domingo Perón.
Su amistad con Perón llevaría a que la Asociación Argentina de Boxeo lo sancionara de por vida por ser opositor a la dictadura militar que derroco a su amigo y compadre, coartando así su carrera profesional en 1955.
La vida golpeo nuevamente al boxeador, olvidado por la gente e injustamente sancionado por una dictadura Gatica se sumergió en la miseria. Falleció el 12 de noviembre de 1963 a los 38 años saliendo de la cancha de independiente atropellado por un colectivo.
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